A018 Enseñanza de la Misión Mundial y la Educación Teológica Más Allá de Estados Unidos
Se resuelve, con la aprobación de la Cámara de Diputados,
Que la 80a Convención General inste a todos los seminarios y programas de formación a incluir la misión mundial como parte fundamental de su plan de estudios; y asimismo
Se resuelve, Que la Convención General reconozca con aprecio las propuestas de los seminarios episcopales y otras instituciones de formación que llegan más allá de Estados Unidos, e inste a estos seminarios y demás instituciones a seguir colaborando con las diócesis y jurisdicciones fuera de los Estados Unidos en el desarrollo de cursos en línea accesibles, en cuanto a contenido y materiales, a quienes estén fuera de Estados Unidos, tomando en consideración: costo, tiempo (si se requiere la discusión en línea), idiomas y certificación, con un énfasis en los estudios anglicanos; y asimismo
Se resuelve, Que la Convención General instruya a la Comisión Permanente sobre la Misión Mundial a que convoque y dirija un grupo compuesto por miembros de la Comisión Permanente y representantes de seminarios estadounidenses y de seminarios y programas diocesanos extranjeros, para colaborar y promover el desarrollo de dichos cursos.
Explicación
Pocas de las jurisdicciones fuera de Estados Unidos tienen seminarios o programas extensos de formación. Dependen de los programas que pueden desarrollar y de otras instituciones y seminarios, a menudo no anglicanos, para la educación y formación teológica. Asistir a un seminario en Estados Unidos no es una opción para la mayoría, por diversas razones. La necesidad es especialmente grande en todos los aspectos de los estudios anglicanos: liturgia, teología, tradición e historia. Aunque ciertos seminarios e instituciones ofrecen algún tipo de programación fuera de sus planteles físicos, tener más cursos disponibles en línea podría ayudar considerablemente a llenar este vacío y reforzar la oferta disponible en estas jurisdicciones. Los cursos disponibles más allá de Estados Unidos beneficiarían no sólo a quienes se encuentran en las diócesis de la Iglesia Episcopal, ya sean los que buscan la ordenación o los líderes laicos, sino también a otros en toda la Comunión Anglicana.